Retiro de Silencio
contactaEl gozo de lo sencillo
Un retiro de silencio es una oportunidad como pocas otras existen para profundizar en la experiencia vital. En el silencio todo se aprecia con más claridad, incluido por supuesto el ruido. Tras un retiro de silencio se vuelve absolutamente evidente que el más molesto de los ruidos que alteran mi paz es el que yo mismo genero. A menudo nos encontramos leyendo en busca de entendimiento, realizando prácticas en busca de liberación, o charlando en busca comprensión, pero a menudo, si estas acciones surgen de la incomodidad o del miedo se acaban convirtiendo en ruido. Y sólo en la ausencia de ruido soy capaz de comenzar a escuchar de verdad. A escuchar lo verdaderamente importante para mi. Un retiro de silencio es una invitación a dejar todo de lado y al mismo tiempo ponerlo todo en el centro, pero desde una perspectiva diametralmente opuesta. Antoine de Saint Exupéry dijo una vez «La perfección no se alcanza cuando no hay nada más que añadir, sino cuando no hay nada más que quitar», y ésto se hace evidente en éste tipo de eventos, en los que la verdad se desnuda a medida que vas quitando capas de “deberes” y “quereres”, a medida que vas volviéndote sencillo y disfrutando de lo sencillo.
A medida que ésto ocurre, se va volviendo evidente, que ese personaje con nombre propio que tanta importancia tiene para mi, no puede ofrecerme nada que quiera verdaderamente, pues todo lo que realmente me conmueve, lo que de verdad hace que mi momento sea extraordinario, ocurre cuando ese personaje está fuera de juego, en perfecto silencio. Y muy a menudo, el único modo que encontramos de dejarnos arropar por la silenciosa magia es en un retiro de silencio.
Retiro & silencio:
Dos puertas a la “Grand Suite”
Retiro y Silencio son dos formas de volver a la verdad, si entendemos ambos conceptos con la profundidad que les honra. Un retiro, tal y como en Libremoción lo entendemos, es un espacio en el que me aparto de la inercia cotidiana para acercarme a la experiencia trascendental -aunque sea a través de las prácticas más cotidianas-. El silencio, por otro lado es igualmente una invitación a las profundidades de la experiencia, al abandono de nuestra habitual forma de vivir y percibir para poder descubrir la intensidad de la sutileza. Si nos damos la oportunidad de aunar el retiro y el silencio y nos comprometemos con ambos estaremos poniéndonos necesariamente en manos de una poderosa experiencia. Pues el verdadero poder, ese que anhelamos sentir, y que falseamos de tantísimas formas sólo emerge cuando puede, que es precisamente cuando dejamos de sustituirlo por falsos poderes, por pensamientos de poder, por apariencias poderosas, por circunstancias que nos hacen sentir poderosos. Ahí en medio de la total inocencia de quien no se siente nadie, emerge el poder de quien por no definirse, está siéndolo todo. Pero a veces es difícil reconocerse en el canto de un mirlo, o en un goteo de agua, cuando estoy afirmando repetidamente quién y cómo soy. Como hemos aprendido que lo que mejor nos funciona es hacérnoslo fácil, te invitamos a experimentar retiro y silencio con nosotros en alguna de éstas fechas.
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